jueves, 15 de diciembre de 2011

Comparaciones

Este año, a A. le ha tocado dar un curso de Ciudadanía. El libro de texto que llevan los alumnos ha resultado ser malísismo, a pesar de ir firmado por José Antonio Marina -se ve que este hombre solo ha puesto la firma, y el libro, como casi todos los de esa clase, lo habrán elaborado, sin tiempo y mal pagados, algunos becarios-, y tiene que buscar en otras fuentes.


Hace unos días les puso en el vídeo Billy Elliot. A la mayoría les gustó mucho, y les ha dado para varias clases de reflexión y comentario. Sin embargo, ayer, uno de los alumnos le hizo una confesión:

-No está mal la película, mastra -que así les dicen en Munera a los docentes-, pero a mí me gusta más Doraemon.


A., rápida, le replicó:

-Entonces conocerás bien estos versos: "Ojalá mis sueños se hicieran realidad, / se hicieran realidad, porque tengo unnnnn montóooooooon...

Y se puso a hablarles de Novita y Sisuka y Gigante, a los que conoce bien por P., que también es muy aficionado, y a comentar esa canción, relacionándola con lo que habían hablado a propósito de la película.

 Dice que la clase salió muy bien.




2 comentarios:

  1. ¡¡Ooooohhh!! Qué recuerdos, qué nostalgia, qué emoción...
    Desde luego, quien no haya visto Doraemon, no ha tenido infancia. Yo creo que estos dibujos son como Los Simpson, que llevan toda la vida en la tele.
    Además, Doraemon es un buen recurso cuando conoces a alguien de tu generación y no sabéis muy bien de qué hablar. Es lo que me pasó a mí con mis compañeros de la Universidad al principio de curso, cuando aún no nos conocíamos mucho. Nos pasábamos los recreos hablando de las series de nuestra infancia y cantando esas cancioncillas tan pegadizas: Doraemon, Digimon, Pokemon, Las tres mellizas...

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  2. Pues no sabes qué suerte tienen sus alumnos, mis hijas a la clase de ciudadanía la llaman la clase de desgracias, porque sólo les hablan de malostratos a los niños, a las mujeres, a los ancianos, a los animales, vamos a todo lo que se mueve e incluso a lo que no se mueve, mobiliario urbano...., así que los días que tienen la asignatura salen deprimidas invariablamente.
    Eso sí, vamos las primeras en la liga de baloncesto, mis hijas no tienen mucho que ver en los resultados, las llaman las hermanas pocoyó, pero ellas como si las metiesen todas.
    Felices fiestas.
    Besos

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